Rethinking internationalization processes: toward a circular framework

Elena Domínguez Romero; Susanne Durst; Antonio Navarro García

Palabras clave:  Proceso de internacionalización no lineal;  Negocios internacionales; Marco circular; Proceso de toma de decisiones; Desinternacionalización; Reinternacionalización

 

El objetivo de este artículo es responder al siguiente interrogante ¿Por qué los modelos y las teorías han fijado límites a los procesos de internacionalización?

La mayoría de los trabajos publicados parten de la base de que los procesos de internacionalización se desarrollan de una forma secuencial o constante a lo largo del tiempo, adoptando un enfoque de tipo lineal. Sin embargo, la internacionalización como proceso de avance, debe ser concebido con un carácter dinámico, que incluye decisiones de entrada, salida y reingreso durante el proceso. Para discutir este tema, este artículo adopta un nuevo enfoque, un marco circular, que permite dar respuesta, hasta ahora no desarrolladas, a las distintas vicisitudes que se plantean durante el desarrollo de procesos de internacionalización.

Los autores proponen un marco circular y cuatro estados en el desarrollo de la actividad internacional: 1) Entrada, 2) Desinternacionalización, 3) Reinternacionalización y 4) Operación Internacionalizada.

La entrada implica el desarrollo de todas las actividades para el inicio de la internacionalización, lo cual implica preparar a la empresa para actuar en mercados exteriores, normalmente muy distintos en múltiples aspectos (culturales, económicos, etc.) al mercado doméstico. Ello puede implicar un cambio de orientación e incluso cultura en la organización.

La desinternacionalización implica el abandono en uno, en varios o en todos los mercados exteriores donde la empresa está presente. Es una toma de decisión complicada pues puede condicionar de forma sustancial la cuenta de resultados de la compañía. Por ello, debe realizarse de forma planificada y sosegada.

La reinternacionalización implica la vuelta a países donde la empresa ya estuvo presente y que hubo que abandonarlos por decisión propia o contingencias externas (guerras, conflictos políticos, etc.). Debe ser un proceso de toma de decisiones muy analítico, sopesando de forma muy detallada cada paso que se de en el país en el que ya se estuvo.

La operación internacionalizada es cuando la empresa considera como consolidadas y permanentes sus actividades en los países en los que actúa y ha realizado todas las actividades necesarias para hacer que sus bienes/servicios sean consumidos, producidos o estén disponibles en cada país-mercado.

El proceso de toma de decisiones guía a las empresas a través de los distintos estados simultáneamente o individualmente, en la misma o distinta dimensión temporal. En este marco circular, los autores plantean una nueva agenda de investigación sobre los negocios internacionales, adoptándose a las contingencias del mundo “real”.